Testimonio

Mi llegada a Bosque de Águilas.

Hola, soy Saúl y comenzaré mi relato diciendo que mi llegada a Bosque de Águilas, siempre lo he sabido, no fue por coincidencia, sino por reconocimiento energético.

La primera persona que me empujo a ver la Realidad en términos energéticos y psico-fisiológicos, estaba en mi seno familiar y fue mi Padre, él también cultivo mi pasión por la Naturaleza. Despuecito, la Mtra. Eloisa a  quien por mas de 20 años he llamado cariñosamente La Tía y donde se incrementó mi filiación por el estudio de la psicología, la astrología, la consciencia. Así que me moví de mis tierras del norte para vivir en Puebla y estudiar psicología.

La universidad era increíble, el departamento de psicología en particular, poseía un reconocimiento y categoría internacional, por sus profesores, sus laboratorios y su alto nivel de investigación. ¡Estaba fascinado! Mi vida universitaria corría maravillosamente y ahí conocí a quienes fueran profesores, mentores y terminaran amigos, particularmente a Rafael, en aquellos tiempos Jefe de Laboratorios de Psicología, así que en los primeros semestres de la universidad, me acerco a su cubículo, me recibe, le pregunto si ¿es posible colaborar en el laboratorio y en sus investigaciones?, al momento me solicita mi horario de clases y comienza a llenar indiscriminadamente el resto de mi día para colaborar con producir conocimiento psicológico. Noto su energía, su alegría, su concentración, su manera particular de envolver y comunicarse. Sucede el reconocimiento de mi parte. 3 semanas mas tarde, regreso a su cubículo y le digo, textual Muchas gracias por enseñarme y dejarme participar en el laboratorio, sin embargo, tú haces más, tú haces otra cosa y también quiero saber. En silencio, toma una hoja y escribe una dirección y aclara verbalmente “llega puntual”. Así conocí al Instituto para el Aprendizaje e Investigación y al grupo de interesados en lo que alcanzábamos a ver en Rafael y queríamos saber como lo lograba. Por lo menos así lo fue para mi.

Meses después de una suave inducción a lo que ahí se practicaba, el momento de la verdad: una invitación al Bosque de Águilas.

Sábado por la mañana, sin dar mayores explicaciones, hago caso omiso de la advertencia previa “llega puntual” 10 minutos tarde fueron grandes maestros, pues me dieron una primera muestra de una de las presas más grandes de mi acecho, mi mecanicidad. La interrupción a mis compañeros, casi me cuesta el viaje.

Desde ese día hasta hoy, 10 años después el viaje aún continua. He visto en este tiempo crecer y madurar el lugar, en perfecta sincronía y planeación ecológica, energética, estética. En esos años reconozco ya la mano particular de Rafael y Maru, así como la de un constante y creciente grupo de personas que tenemos la oportunidad de gozar de un lugar Sagrado, porque lo que ahí se practica y se permite es vivir en el Ser, en la Consciencia, de una manera única, pues combina el conocimiento científico y de Tradición que Rafael posee, con el Amor, fino humor producto de su creatividad y eldelicioso sazón que posee Maru. Su energía es un jingjang en balance y amor por si mismos, su familia y su tierra, la Tierra.

Que gente así te abra las puertas para compartir tan hermoso espacio, pues en su corazón existe la certeza de que el Gran Espiritu les ha hecho un llamado, al cual con Impecabilidad han asistido, creando y recreando constantemente Bosque de Águilas es siempre una oportunidad que hay que tomar. Aunque no los conozcas.

He llamado a Rafael por 2 nombres anteriores a este, al igual que a Maru y a Bosques de Águilas, y cada faceta, cada nombre, me ha mostrado diversas Realidades, he experimentado el lugar, en diversas edades y condocenas de gentes. La energía es profunda, el regalo muy claro, la guía y el espacio, les repito, Impecables. Mi llegada a Bosque de Águilas, fue llegar por fin a mi mismo, desde aquí me he movido con Libertad a dondeYo he querido.